CASINO EN RAPANUI

ENJOY RAPANUI

Petero Riroroko es un empreario isleño quien se asocia con AM Corp, un operador de casinos que pretende invertir U$14.000 para instalar un casino de juegos en Isla de Pascua.

Con ello, la disputa, el dicernimiento, nostalgias, temores y ambiciones han despertado entre sus habitantes y quienes nos encontramos lejos.

Lo cierto es que la capacidad de carga isleña, en relación a la infraestructura existente, es deficiente y no se puede aumentar a corto plazo., pero veamos:

POR QUÉ SÍ AL CASINO

• .......No encontramos nada positivo...
  
  POR QUÉ NO AL CASINO
  
• La ciudad de Hanga Roa no cuenta con un sistema de alcantarillado, simples cámaras depuran las aguas servidas hacia las profundidades que luego son nuevamenete traídas a la superficie por el sistema de Agua Potable. Hace un par de años se realizó un estudio que reveló la incapacidad física de la isla para soportar más flujo humano.
• De los 160 puestos de trabajo, probablemente un 70 % de ellos serán de bajo perfil, temporeros o por turnos.
• Ningún rapanui irá a jugar brisca al casino, es probable que los "jugadores" extranjeros se entusiasmen en "salones clandestinos" y terminen armándose verdaderas mafias.
• El juego atrae drogas, alcohol y prostitución con lo que se colocaría en riesgo social a las generaciones venideras si se envicia a las actuales.
• El turista que llega a los casinos, no es tal, es un jugador disfrazado de turista, por lo que poco le importará si está en Las Vegas, en las Pirámides o en Machupichu, puesto en su perfil, no se destaca precisamente la cultura.
• No se vería muy bien un casino en medio de un Museo Abierto y en una zona protegida por la UNESCO.

La razones son inumerables y quienes mejor las entendemos, somos quienes hemos vivido y vivimos en la isla.

Pero revisemos algunas declaraciones publicadas por El Mercurio el 20 de Agosto, Cuerpo C página 9, artículo de Jorge Molina Titulado "Pascuenses se debaten entre tradición y un nuevo turismo"

Enrique Pakarati Ika, Gobernador Provincial.

Sostiene su oposición al Proyecto argumentando el cuidado prolijo de las riquezas culturales para el turista selecto. Sabia decisión, puesto ve que el trabajo y las divisas se generan tranquilamente, a través de esta explotación de recursos, que no hay que agotar a corto plazo.

Alberto Hotus, Presidente de "uno" de los Consejos de Ancianos de Rapanui.

A favor del Proyecto, asegura que tiene claro "...que el progreso no puede destruir la cultura...". Frase para el Bronce diría Fernando Paulssen!

Recordemos que Hotus convocó hace unos años a los rapanui a comprar acciones para la línea áerea isleña HAMBURGRAPANUI, que felizmente nunca se concretó. Las casas de Orongo se ven perjudicadas por las ondas sonoras que llegan como vibraciones a las estructuras de piedra, soltándolas sostenidamente por cada avión que transita Mataveri.

Hotus dice "...por qué no gozar lo que viene a favor de la gente..."

No todo lo que brilla es oro...

Hipólito Ika, Consejal. A favor de la propuesta por la generación de empleos.

Dice que nadie se preocupa de la cesantía.

Pero en serio, ¿hay cesantes en la Isla? o personas que no tienen trabajo regular. Ciertamente el rapanui tiene otro concepto de trabajo, así es que si se pretende tenerlos 8 horas dentro de una oficina haciendo una sola cosa, entonces está lleno de cesantes, el 90% quizás.

Hay muchos isleños que tienen tierras cultivables, pero quieren hacerlo todo ellos solos y no contratan a nadie, porque o no quieren gastar en pagar o confían en las tradiciones que todos se ayudaban porque sí, cual minga chilota. Eso genera más cesantía que un casino trabajo.

El Gobierno sí se preocupa, pero no siempre la gente con la que trabaja es la más acertada para llegar a ayudar al pueblo.

En este artículo de Molina, queda en manifiesto que el más acertado de los entrevistados ha sido el Gobernador y esperamos que en su calidad de integrante del Consejo Nacional de Monumentos Nacionales haga todo cuanto esté a su alcance para impedir la construcción del Casino.

Esperamos que el Municipio y los Consejales sepan oír la opinión de la comunidad y ver cómo conseguir que esa misma inversión para Enjoy Rapanui se transforme en algo más constructivo para la Cultura.

KF./